Algunos dolores son difíciles de soportar especialmente aquellos causados por la muerte de alguien que amamos; no ha sido fácil aceptar la partida de mi padre, pues es una de las experiencias más difíciles que he tenido que asimilar, Dios pone en nuestro camino a ángeles y personalmente consideró que Sofí es uno de ellos, cuando la conocí aprendí que el duelo es un camino con curvas, pues me enseñó cómo vivirlo y aceptar que nadie deja de querer de la noche a la mañana a un ser querido, pues nunca dejaremos de amar a quien ya no está, el amor se transforma y siempre vamos a llevar a esa persona en nuestros corazones.

Después de esta pérdida aprendí a ver la vida desde otra mirada, pues ahora sé que no somos eternos, pues la vida nos da y también nos quita y con eso no podemos luchar, Dios me dio un padre tan maravilloso y ahora guardo cada recuerdo y cada momento de felicidad que pasamos en familia, Me siento totalmente bendecida y agradecida por todo, mil gracias mi Sofí querida. 

Gina Guerra


No existen palabras ni explicación para agradecerte todo lo que hiciste por mi Mamá y por mi. Solo queda agradecer desde el corazón. Agradecer a la vida que te puso en nuestro camino. Y nos enseñaste a comprender y ver este proceso de otra manera, que aunque sigue siendo doloroso, no se qué habría sido de nosotros ni como habría sido todo esto sin tu ayuda profesional, apoyo, empatía, acompañándonos en todo el proceso. Con un corazón gigante nos diste todo en todo momento, nos levantabas cuando nos caíamos con cada noticia médica, la persona humana, generosa, con grandes sentimientos que eres y que das, con todos tus conocimientos. No sé si sepas, pero cambias vidas querida Sofi. Estoy seguro que existen pocas personas con tanta vocación por lo que hacen.

Ojalá se esparciera todo tu conocimiento en muchas personas, así podríamos ver la vida de otra manera y tener la oportunidad de entender lo importante que es compartir tiempo con los seres que amamos. Sé que mi Mamá desde donde nos acompaña por siempre esta y estará eternamente agradecida contigo por hacer más fácil su partida.

Gracias infinitas Sofi, desde lo más profundo de mi ser. por todo!

Ricardo Betancourth


Sofi, eres una persona maravillosa! Haces que el difícil proceso de una enfermedad catastrófica no sea tan traumático tanto para el paciente como para los familiares. Estas llena de amor, eres una bendición.

Clara Bello Guevara


Hace dos años murió mi padre. En el momento que inició su proceso de muerte un frío inmenso me recorrió la sangre y no supe ni cómo ni qué era lo que venía. En esos momentos en que la mente se queda en blanco y el corazón late a mil por hora, tuve la bendición de cruzarme con los ojos de Sofi y que en ese intercambio una energía de amor me dijera que no estaba sola y que todo pasaría. Sofi nos acompañó de principio a fin con una sonrisa de aliento y empatía. Nunca imaginé que seres humanos así existían, seres que ayudaran a pasar por este viaje obscuro con amor, Sofi es un ser así para mi. Mi gratitud eterna.

Carmen Irene Moncayo


Sofia fue la persona con quien pudimos contar durante los últimos días de vida de mi padre. Con su carisma no solo nos dio tranquilidad en esos momentos tan difíciles, sino que realizo actividades diarias con mi hermana pequeñita de forma que pudiera disipar sus miedos, hacer preguntas, y plasmar el legado de nuestro padre por medio de actividades en las que se usaron la imaginación y se inspiraron en el amor. Estamos totalmente agradecidas por el tiempo que Sofía estuvo con nuestra familia.

Carolina Perez


Más allá de un trabajo muy bien hecho en donde le pones pasión, amor, dedicación, eres un ser hermoso e incondicional. Te llevo en mi corazón y ojalá todos pudieran tener la oportunidad de contar contigo.

Loly Espinosa


Cuando recibimos el diagnostico terminal de mi madre la familia quedó devastada. Alguien nos recomendó a Sofía, quien ha trabajado con mi mami durante su proceso del cáncer, sus planes, sus deseos, sus miedos, y sobre todo, a cerrar todos los pendientes en su vida. Mi madre encontró calma y serenidad cada vez que Sofía la visitaba. En realidad su presencia hizo una gran diferencia al final de la vida de mi querida madre.

Juan V.